
“Cuando llueva busca el arcoíris, cuando haya oscuridad busca las estrellas” Las personas resilientes tienen una mayor capacidad de ser más agradecidos y crean relaciones más fuertes y significativas. La resiliencia es la capacidad de recuperarse de la adversidad y perseverar hasta alcanzar los objetivos propuestos a pesar de los desafíos. Día a día enfrentamos desafíos, se nos vacía una goma del auto, llegas a la escuela de tus hijos te das cuentas que a uno de ellos se le quedó el proyecto encima de la mesa del comedor, necesitas llegar tranquil@ al trabajo hoy es el día que tienes la encomienda de guiar a tu equipo a lograr sus metas del mes. La resiliencia es esta habilidad que nos puede ayudar a sobrevivir en nuestros peores días y a salir a flote en los demás. Según el Dr. Chris Peterson, autor del libro “The Good Life”, “la resiliencia es la capacidad de dar una buena pelea”. Martin Seligman, es el precursor de la psicología positiva. La psicología positiva tiene como objetivo desarrollar y nutrir los aspectos afirmativos de la conducta humana, a través de estudios científicos y métodos de intervención eficaces para lograr la satisfacción emocional en los individuos. Seligman explica que la gratitud es una actitud donde el individuo se muestra estar agradecido, incluso cuando no ven lo que tiene. “Cuando tenemos un gesto bondadoso o de gratitud se produce un aumento momentáneo en el bienestar en las personas que ningún ejercicio puede lograr”. Piensa cada vez que haces algo bueno por alguien o alguien hace algo bueno por ti, ¿Cómo te sientes?
Hoy día nos enfrentamos a grandes desafíos, algunos son pequeños y otros son grandes, cuando día a día suceden, comenzamos a pensar que a nuestro alrededor no ocurre nada bueno y no queremos seguir luchando y hasta pensamos que no vale la pena ayudar a otros si a uno no le ocurren cosas buenas. Nos ponemos un caparazón para protegernos y no vemos las cosas buenas que realmente si ocurren y por las que podemos estar agradecidos. Las pequeñas cosas buenas que suceden a nuestro alrededor también se juntan y pueden causar grandes cambios no tan solo en uno sino en la gente que te rodea. Esto lo hemos vivido todos aquellos que hemos experimentado eventos catastróficos como lo fueron los huracanes Katrina, Harvey, Irma o María. Nuestros vecinos, fueron nuestras familias inmediatas, dejaron de ser invisibles. Los desconocidos se convirtieron en ángeles de buena voluntad, nos unimos en una causa: salir adelante, aprendimos a ser resilientes y a atesorar las pequeñas grandes cosas a nuestro alrededor. ¡Hasta las abejas se convirtieron en una causa para luchar y mantenerlas vivas contra viento y marea!
Lo que la ciencia nos dice sobre la gratitud es que cuando lo practicamos regularmente (incluso una solo vez al día) puede: ● disminuir el estrés, ● aumentar la felicidad, ● bajar la presión arterial e ● inspirar más bondad y más gratitud. La persona que hace un acto bondadoso y el que lo recibe experimentan estos beneficios, ¡pero cualquier persona que observa el acto experimenta exactamente los mismos beneficios!

¿Qué nos dice la ciencia sobre la gratitud?
● La gratitud reduce el estrés y juega un papel importante en la superación de traumas.
● La gratitud fomenta la resiliencia al reconocer todo por lo que estás agradecido, incluso en los peores momentos.
● La gratitud tiene el poder de sanar, el poder de traernos esperanza y el poder de ayudarnos a sobrellevar los momentos más difíciles.

Hay diversas estrategias que podemos usar para construir resiliencia, aquí menciono algunas:
1. Un diario de gratitud nos puede ayudar a ser más resilientes, nos ayuda a ver más allá de lo que nuestros ojos perciben. Tener un diario nos ayuda a afirma las bondades que rodean nuestras vidas y agrega a nuestra alcancía emocional herramientas para poder salir adelante. Nos permite reflexionar sobre lo que estamos agradecidos y lleva a percibir más cosas por las cuales estar agradecidos.
2. Recordar cosas o momentos malos. Los momentos difíciles en nuestras vidas pueden afinar y profundizar el agradecimiento. Nos recuerdan que no debemos dar las cosas por sentado. Nos enseñan a buscar soluciones, ser más flexibles y decididos.
3. Manifiesta amabilidad, bondad y agradecimiento. Expresa tu gratitud tomando acción. Haz algo por aquellos en tu vida por quienes estás agradecido e inclusive haz actos bondadosos a quienes no conoces. Los actos bondadosos aleatorios se multiplican causando en otros estados de felicidad y esperanza. Cuando practicamos la bondad, la amabilidad y la gratitud diariamente se convierten en cosas rutinarias que hacemos de manera natural.
El Dr. Robert Emmons dijo: “La gratitud implica humildad: un reconocimiento de que no podríamos ser quienes somos o dónde estamos en la vida sin las contribuciones de los demás. Ser agradecido es un reconocimiento de que hay cosas buenas y gratas en el mundo “
Puedes escribir una carta de agradecimiento a alguien que haya cambiado tu vida para mejor. Piensa en un colega, un maestro en la escuela o incluso un miembro de la familia. También puedes escribirte una carta celebrando y describiendo tus fortalezas, habilidades, valores, comportamientos y acciones que han tenido un efecto y continuarán teniendo un efecto en otros de manera positiva.
Después de escribir tu carta a otra persona, envíasela, expresemos el impacto positivo que ha creado en nosotros. Lee la carta que te has escrito, tan a menudo como sea necesario (puede ser semanal, mensual), a menudo no nos tomamos el tiempo para reconocer todos los regalos que traemos a los demás.
Tomarse el tiempo para reflexionar sobre lo bueno que hay y ocurre en nuestras vidas nos da el regalo de la gratitud. El mundo siempre nos mostrará lo bueno y lo malo, pero hoy pasemos tiempo agradecidos por lo que tenemos. De esta manera, podemos llenar nuestra alcancía emocional y cultivar nuestra propia capacidad de recuperación. Mantener la alcancía emocional muy cerca de uno nos permite recordar que siempre hagamos depósitos para tener las herramientas que nos ayudaran a seguir adelante.

Practica la gratitud hoy y siempre para que en los momentos en que encontremos desafíos en nuestras vidas podamos tener la capacidad de ser resilientes.
Al despertar: envía un mensaje de texto positivo
Al desayunar: hazlo saludable
Al hablar con alguien: menciona sus aspectos positivos y felicítalo por ellos
Al salir: recoja la basura seamos agradecidos de nuestro planeta, nuestro hogar
Al irte a la cama: escribe una lista de cosas por lo cual estas agradecido
El efecto dominó de la bondad y el agradecimiento: cada vez que muestras agradecimiento y respeto hacia alguien, le proporcionas un sentimiento que perdura y lo inspira a hacer algo bondadoso y respetuoso por otra persona.
Educa al corazón a dar compasión, aceptación y tolerancia te permitirá navegar de manera resiliente por este mundo. Pasa la llave para crear un mundo mejor, enseña a otros a ser y hacerlo mejor.
Referencias:
The Random Acts of Kindness Foundation www.randomactsofkindness.org
Dalai Lama Center: For Peace + Education.